Puedes modificar algunos hábitos alimentarios y notarás cómo empezarás a sentirte mejor. No es algo sencillo y que suceda de un día para el otro, eso está claro. Estamos hablando de un proceso que lleva tiempo, voluntad y constancia, para en definitiva priorizar la salud.
Hábitos alimentarios que puedes modificar
Organización: todo inicia con planificar la lista de compras. Al planificar esto, sabes de antemano que comprar, no caes en compras innecesarias e incluso puedes pensar cuantos gustos y premios te darás.
Así las cosas, también puedes pensar en qué usarás cada cosa que compres, planificar tus comidas y la reserva de insumos.
Dedica tiempo: a la hora de cocinar, trata de hacerte tiempo para hacerlo de manera divertida, en compañía y con música. Los fines de semana pueden ser un buen momento para preparar viandas para la semana y platos sencillos de descongelar y comer al instante.
Suma vida activa: si no estás haciendo todo el ejercicio que deseas, comienza por pequeños cambios. Activa subir y bajar escaleras, puedes bajarte antes del transporte público y terminar el recorrido a pie o ir al gimnasio en bicicleta ¡Múevete! eso es lo importante.
