Alicia Civita
Miami .- En un clima en el que las grandes cadenas de librerías siguen anunciado cierres en Estados Unidos, las dedicadas al romance han logrado subsistir, y además se están expandiendo por el país.
“Es el mejor lugar para compartir el gusto por la lectura, las historias de amor y con comunidad, que une a los amantes de este género”, dijo a EFE Jamie Vaughn, asidua cliente de Steamy Lit, uno de estos negocios que abrió en febrero de 2024 en la localidad de Deerfield Beach, al norte de Miami (Florida).
Alyssa Rojas, encargada de eventos de Steamy Lit, explicó a EFE que el negocio tiene una triple misión. “Buscamos crear comunidad, promover la lectura e impulsar a los autores que suelen ser ignorados por el mercado general”, explicó en referencia a aquellos de minorías raciales o de identidad de género.
Melissa Saavedra, una peruana veterana de la Marina estadounidense, es la dueña de Steamy Lit, que se traduce como “Literatura vaporosa” y hace referencia a las “historias ardientes” que pusieron de moda el género hace poco más de 15 años.
Cifras de la industria editorial indican que el auge de la literatura romántica es un fenómeno.
Las ventas de libros en papel de este género han crecido globalmente; en Estados Unidos han superado el 42 % en los últimos dos años; mientras que en España la proyección para 2024 era del 7 %, según datos del sector.
El subgénero del momento es el ‘romantasy’, que fusiona romance y fantasía, y que también ha impulsado la literatura de la ciencia ficción.
Detrás del crecimiento de las librerías de romances está la pasión por las historias de amor y las ganas de tener una comunidad que expanda el concepto del club de lectura, afirmó Rojas, para quien este es el secreto del éxito de este tipo de negocios.
Según la Asociación Estadounidense de Libreros, un grupo que representa a las librerías independientes, en 2024 se registró un aumento del 11 % en este tipo de negocios, la mayoría con libros enfocados en géneros específicos.
Entre estas nuevas librerías, las dedicadas al romance son la principales, pero también destacan las dedicadas al genero del terror y a los temas sociales, especialmente en los estados donde el gobierno ha vetado libros.
Más cierres que inauguraciones
En contraste, las grandes cadenas de librerías siguen con dificultades. En 2024, se cerraron el doble de sucursales de las que se abrieron, según un estudio de la firma PwC, sobre el comportamiento del sector comercial.
Steamy Lit ha sabido capitalizar esta tendencia al ofrecer una selección diversa que atrae a una amplia gama de lectores. Desde romances contemporáneos hasta historias de amor ambientadas en mundos fantásticos. La librería procura que cada lector encuentre su “felices para siempre”, afirmó Rojas.
“Este año abrimos una segunda librería en Tampa y estamos buscando un local para otra en Miami”, aseguró la propietaria de Steamy Lit.
Pero este no es el único local próspero y con una propuesta similar. En Houston (Texas), Mossrose Bookshop, una librería propiedad de Andrea Sifuentes-Echavarría, otra latina, ha crecido con éxito tras empezar con kioscos en eventos. Otra es The Ripped Bodice, ubicada en Culver City (California).
“No estamos en contacto con todas, pero sí nos apoyamos justamente porque somos una comunidad”, indicó Rojas, quien incluye en el grupo a los club de libros de mujeres y hasta a los de audiolibros.
Steamy Lit y el resto de librerías similares realizan también eventos sociales, sesiones con autores, y reuniones para comentar lecturas como “El club de libros de Bad Bunny”, que se especializa en historias de amor en español.
Para celebrar el pasado Día de San Valentín, una treintena de clientas se reunieron en Steamy Lit. Algunas de ellas eran amantes del género de toda la vida. Otras descubrieron la literatura romántica y sexy gracias a la locura que desató la saga de ‘Cincuenta sombras de gris’. Otras llegaron gracias a Book Tok, la tendencia de críticas de libros en TikTok. Pero, todas están convencidas de que el romance salvó las librerías “de verdad”. EFE
