Según la Sociedad Española de Neurología, cuatro millones de españoles sufren insomnio. Entre ellos, varios recurren a suplementos de magnesio con el fin de conciliar el sueño.
El magnesio es un mineral muy importante para el organismo. Interviene en múltiples funciones, desde el metabolismo de los huesos hasta la regulación de la presión arterial.
Está presente en varios alimentos, como la leche, los vegetales de hoja verde y las legumbres, pero para dormir se suele indicar en forma de suplementos. No obstante, su uso con este objetivo está en tela de juicio por parte de varios expertos. Lo analizamos en detalle.
¿Por qué podría ayudarte a descansar un suplemento de magnesio?
El magnesio interactúa con unos receptores llamados NMDA, que están en las neuronas. Estos receptores participan en la memoria, el aprendizaje y la percepción de dolor. En lo químico, regulan la excitabilidad de las células nerviosas. Lo que se observó es que, en personas con déficit o carencia del mineral, hay mayor excitación de las neuronas, más estado de nerviosismo y menos posibilidades de conciliar el sueño.
Así mismo, el magnesio tiene influencia directa e indirecta sobre la melatonina, la hormona del sueño. Los niveles adecuados del mineral en la sangre estimulan la producción de la hormona, pero también evitan que se calcifique demasiado la glándula pineal, lugar donde se fabrica la melatonina.
Otra de las sustancias que se ve afectada por los niveles de magnesio es el cortisol. El mineral puede reducir su liberación y, por lo tanto, limitar sus efectos negativos en el estrés.
Finalmente, también sabemos que el magnesio es estimulante de los receptores del ácido gamma-aminobutírico o GABA. Al estimularlos, se produce más GABA, capaz de generar un estado de relajación, que es necesario para conciliar el sueño.
¿Qué dice la ciencia sobre el magnesio y el insomnio?
Hasta ahora, hay evidencia tanto a favor como en contra. Si bien se pueden hallar estudios científicos que respaldan sus beneficios, para muchos profesionales no hay datos contundentes que justifiquen su prescripción en personas con trastornos del sueño.
Algunas investigaciones señalan que la suplementación con magnesio mejora las horas de descanso en personas que tienen una deficiencia del mineral diagnosticada. Algo que es frecuente entre los adultos mayores, también más susceptibles a padecer insomnio.