Todd Zolecki/MLB.com
FILADELFIA – Los Filis están viviendo un gran momento y también puede decirse lo mismo de su bullpen, que con una gran actuación el sábado fue clave para ganar el Juego 4 ante los Bravos y asegurar así el boleto a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional por primera vez desde el 2010.
Luego de que Noah Syndergaard abriera por primera vez desde el 1 de octubre, permitiendo una carrera en tres innings, Andrew Bellatti, Brad Hand, el venezolano José Alvarado, Zach Eflin y el dominicano Seranthony Domínguez cedieron sólo dos rayitas el resto del camino.
Entre todos, los seis pitchers poncharon a 15. Y no dieron boleto.
“Es como dijo Alvarado: strike uno, strike dos y buena suerte”, dijo Domínguez.
Alvarado dijo eso después del triunfo de Filadelfia sobre los Bravos en el Juego 1 en Atlanta.
La frase terminó impresa en unas franelas que los relevistas de los Filis utilizaron el resto de la serie.
El bullpen de los Filis había sido fuente de frustración durante muchos años. Su mal accionar les costó el trabajo a muchos, mientras la sequía de la franquicia sin ir a postemporada se extendía a 11 años. El cuerpo de relevistas dejó efectividad de 7.06 durante la abreviada temporada 2020, la segunda peor para un bullpen en los últimos 90 años. En el 2021, desperdiciaron 34 oportunidades de salvar, un récord en ese momento. Colapsos épicos se convirtieron en algo común. Este año, dejaron ir una ventaja de seis carreras en el noveno contra los Mets durante una dolorosa derrota el 5 de mayo. Era la primera vez que desperdiciaban una diferencia de seis anotaciones en el noveno acto desde 1994 y apenas la segunda vez que pasada desde 1937.
Pero en el juego más importante de la temporada, el grupo respondió de la mejor forma posible y el plan de usar a Syndergaard por una sola vuelta ante el lineup de Atlanta y luego darle la pelota al bullpen salió a la perfección.
“Todo el mundo lanzó bien”, dijo el manager Rob Thomson. “Uno puede tener el mejor plan del mundo, pero si alguien no lanza bien, todo se va por la ventana”.
Y hay razones para ser optimistas con el grupo de relevistas de cara a la SCLN contra los Padres. Domínguez perdió el control cuando regresó de la lista de lesionados el mes pasado, pero no podría estar lanzando mejor que ahora mismo. El control y la velocidad están de regreso. Sus rectas promediaron 99.5 mph en el noveno acto del Juego 4.
Cuatro de los 12 pitcheos más duros que ha hecho Domínguez en la temporada fueron en ese inning.
“Estoy de regreso”, dijo Domínguez. “Definitivamente estoy de vuelta”.
Alvarado fue enviado a Triple-A el 27 de mayo. Desde que volvió el 12 de junio, tiene EFE de 2.09 en 47 presentaciones, incluyendo la postemporada. En 42 innings, ha ponchado a 69 y ha dado 16 boletos.
“Ahora mismo es uno de los mejores relevistas en el mundo”, comentó Domínguez sobre su compañero.
Alvarado también se siente de maravilla. Dejó el montículo con dos outs en el séptimo inning, elevando los brazos y saludando al público.
“No es fácil vencer a Atlanta”, dijo.
Y hay razones para ser optimistas con el grupo de relevistas de cara a la SCLN contra los Padres. Domínguez perdió el control cuando regresó de la lista de lesionados el mes pasado, pero no podría estar lanzando mejor que ahora mismo. El control y la velocidad están de regreso. Sus rectas promediaron 99.5 mph en el noveno acto del Juego 4.
Cuatro de los 12 pitcheos más duros que ha hecho Domínguez en la temporada fueron en ese inning.
“Estoy de regreso”, dijo Domínguez. “Definitivamente estoy de vuelta”.
Alvarado fue enviado a Triple-A el 27 de mayo. Desde que volvió el 12 de junio, tiene EFE de 2.09 en 47 presentaciones, incluyendo la postemporada. En 42 innings, ha ponchado a 69 y ha dado 16 boletos.
“Ahora mismo es uno de los mejores relevistas en el mundo”, comentó Domínguez sobre su compañero.
Alvarado también se siente de maravilla. Dejó el montículo con dos outs en el séptimo inning, elevando los brazos y saludando al público.