María Hernández
Las redadas anti humanas que realizan las autoridades de la Dirección General de Migración no parecen responder a algún tipo de protocolo especial.
Son más bien una cacería de personas a las que se detiene, desde donde se encuentren por los rasgos étnicos que poseen aunque en muchos casos los detenidos presenten su documentación.
De a acuerdo a lo que dicen los mismos agentes de esa institución no cuentan con equipos tecnológicos especializados para poder determinar, al momento del apresamiento, si un ciudadano, por lo regular de origen haitiano, está legal o no en nuestro país, por lo que lo envían al centro de detención de Haina para su depuración con toda la burocracia y la pérdida de tiempo que ello implica para los detenidos.
Muchos son retenidos en las entradas o salidas de sectores como el Hipódromo V Centenario, donde los esperan con unas guaguas con rejas, propia para animales y suelen encerrar hasta 50 personas, apretadas como sardinas y a merced del sofocante calor tropical.
Detienen a los inmigrantes en todas partes, en hospitales, en las iglesias, en las construcciones, en hoteles, en autobuses, niños solos o acompañados. No parece haber un protocolo que les diga a los agentes de Migración a quién detener o a quién dejar y en qué lugar o a qué hora hacerlo.
Los organismos de derechos humanos internacionales han denunciado el mal trato que reciben los ciudadanos haitianos ilegales que por una u otra causa eligen a República Dominicana como un destino cercano y habitable para huir de la violencia social que desde hace años abate a la población de Haití.
Según la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) más del 42% de la población haitiana está necesitando una asistencia humanitaria y un 40% de ese país está pasando por una situación de inseguridad alimentaria grave.
En febrero de este 2023, el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk advirtió que “Hasta que se resuelva la grave situación del país, está claro que las violaciones y abusos sistemáticos de los derechos humanos no permiten actualmente el retorno seguro, digno y sostenible de los haitianos a Haití”, indicó Türk durante una rueda de prensa en Puerto Príncipe luego de su visita a ese país.
Recordó que en el 2022 unos 176.000 haitianos fueron repatriados por nuestro país, cuando el derecho internacional en lo concerniente a derechos humanos “prohíbe la devolución y las expulsiones colectivas sin una evaluación individual y de todas las necesidades de protección antes del retorno”, señaló en un escrito del medio periodístico swissinfo.ch.
Si se revisa el Protocolo de Entendimiento sobre los Mecanismos de Repatriación firmados entre la República Dominicana y la República de Haití Suscrito el 2 de diciembre de 1999 se tiene que: