Con la espalda contra la pared tras perder los dos primeros partidos de la serie, los Minnesota Timberwolves se hicieron fuertes este sábado en casa y arrollaron por 143-101 a los Oklahoma City Thunder, al anular a Shai Gilgeous Alexander y a Chet Holmgren, para reabrir las finales de la Conferencia Oeste de la NBA.
Fue un monólogo de los Wolves de principio a fin. El equipo de Chris Finch mandaba 72-41 al descanso y alcanzó los 42 puntos de ventaja en el tercer período frente a unos Thunder que sacaron de la pista a sus estrellas ya a mediados de ese cuarto.
Anthony Edwards comenzó con 16 puntos y un seis de ocho en tiros de campo un partido acabado con 30 puntos, nueve rebotes, seis asistencias y dos robos en 29 minutos.
Conectó cinco triples en un auténtico festival de los Wolves, que anotaron prácticamente desde todas las posiciones y que conectaron en total 20 tiros de tres puntos.
Julius Randle metió 24 puntos y Jaden McDaniels aportó diez puntos y seis rebotes, pero los Wolves también tuvieron a tres suplentes con dobles dígitos en anotación. Terrence Shannon consiguió quince puntos, Nickeil Alexander-Walker contribuyó con doce y Naz Reid logró diez y ocho rebotes.
El banquillo de los Wolves aportó 66 puntos por los 52 del de OKC.
Dominio absoluto de los Wolves
Y si los números ofensivos de los Wolves fueron asombrosos, también lo fue la agresividad defensiva que desactivó al MVP Shai Gilgeous Alexander. ‘SGA’ terminó con catorce puntos (4 de 13 en tiros), Jalen Williams metió trece y Chet Holmgren no pasó de los diez.
Minnesota selló un 14-0 en el primer período que dejó tocados a los Thunder, que ya perdían por veinte puntos en el 34-14. Los locales estuvieron por arriba del 50 % tanto en tiros de campo como en triples y su ventaja superó los 30 puntos en el segundo período.
El 72-41 de la primera mitad ya dejaba encarrilada la victoria de los Wolves.
Los Thunder dieron señales de vida al principio del tercer período, con un 11-2 que les acercó hasta el 52-74, pero solo quedó en una anécdota. Los Wolves respondieron con un 12-0 y siguieron pisando el acelerador hasta un humillante 103-61.
OKC, sin titulares en el cuarto período
En el cuarto período, con Gilgeous Alexander, Holmgren y los demás líderes de OKC sentados en el banquillo y pensando ya en el cuarto partido, la ventaja de Minnesota alcanzó los 45 puntos en el 129-84.
El equipo de Chris Finch cambió la inercia de la serie y recortó distancias con el 1-2 para retomar confianza de cara al cuarto partido, fijado este lunes, de nuevo en el Target Center.
El ganador de esta serie afrontará a uno entre Indiana Pacers y New York Knicks, que se afrontan en las finales del Este.
Los Pacers dieron un paso agigantado hacia sus primeras Finales NBA en 25 años tras ganar los dos primeros partidos a domicilio, en el Madison Square Garden de Nueva York. Las Finales comenzarán el próximo 5 de junio. EFE
