Dubái.- La COP28 ha adoptado en su primer día la decisión que pone en marcha el fondo de pérdidas y daños, que compensará a los países más vulnerables al cambio climático por los impactos del calentamiento y al que Emiratos Árabes Unidos, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos y Japón, entre otros países, se han comprometido a contribuir.
La decisión, que el presidente de la COP28, Sultán Al Yaber , ha calificado de “histórica” -pues “es la primera vez que se adopta una decisión en el día uno de la cumbre”, ha señalado- recoge la propuesta del Comité Transicional que durante el año se ha reunido para precisar los detalles de este nuevo fondo.
“La velocidad a la que lo hemos hecho ha sido también única, fenomenal e histórica”, ha destacado Al Yaber tras aprobarse el documento.
Ante la falta de consenso sobre uno de los puntos más polémicos respecto al fondo -dónde se alojará- el comité decidió en su última reunión en Abu Dabi, a principios de noviembre, que el Banco Mundial lo acogerá de manera provisional, al menos durante cuatro años.
Esta sugerencia, sin embargo, fue por algunos representantes de países del Sur Global y por grupos de la sociedad civil, que exigían que el fondo fuera independiente del Banco Mundial, pues desconfían de esta institución.
Los países, reunidos en el primer día de la COP28, han adoptado formalmente la decisión que hace operativo al fondo, que nace además con los primeros compromisos oficiales de aportaciones por parte de algunos estados considerados como los mayores responsables históricos de la crisis climática.
Emiratos Árabes Unidos y Alemania han prometido cada uno aportar 100 millones de dólares al nuevo fondo, mientras que Reino Unido ha asegurado que destinará 40 millones de libras esterlinas al fondo y otros 20 millones a otros mecanismos de financiación para pérdidas y daños.
EE.UU., por su parte, ha alegado que contribuirá con 17,5 millones al fondo, y que además donará 4,5 millones de dólares al Mecanismo de Resiliencia del Pacífico, y otros dos millones y medio a la red de Santiago para su puesta en marcha, reconocidos como “elementos clave del mosaico más amplio de apoyo a los países y comunidades vulnerables a la hora de afrontar y responder a los impactos de la crisis climática”, según el enviado especial para el clima de EE.UU., John Kerry.
Japón, en paralelo, ha anunciado también que aportará 10 millones al fondo.