Jordan Bastian/MLB.com

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CHICAGO – Después de que los Cachorros descorcharon las botellas de champán en Pittsburgh durante su última gira –celebrando haber asegurado el primer boleto a la postemporada de la franquicia en cinco años– el club comenzó a centrar su atención en el siguiente objetivo. El equipo quería traer el béisbol de octubre de vuelta al Wrigley Field.

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La tarde del sábado, Michael Busch despachó dos jonrones para ayudar a que eso sucediera en una victoria por 7-3 sobre sus rivales, los Cardenales, en los “Friendly Confines”. Con el triunfo, los Cachorros evitaron un vuelo a través del país a San Diego, ganando el derecho a ser anfitriones de la Serie del Comodín de la Liga Nacional al mejor de tres, que comienza el martes.

“Poder darles a estos aficionados el béisbol de octubre, eso va a ser muy especial”, expresó el jardinero central de los Cachorros, Pete Crow-Armstrong, esta semana. “Sabemos cómo jugar pelota aquí. Nos encanta todo lo que viene con este lugar”.

La victoria ayudó a los Cachorros (91-70) a aumentar su ventaja sobre los Padres (88-72) a 2.5 juegos por el primer puesto del Comodín de la L.N. con solo un partido restante en el calendario de la temporada regular. Chicago también fue anfitrión de una Serie del Comodín en el 2020, pero sin aficionados en las gradas. El último lleno total en el Wrigley para un juego de playoffs fue en el 2018, cuando los Cachorros se enfrentaron a los Rockies en el Juego del Comodín.