El dominicano Sammy Sosa vivió este domingo uno de los momentos más significativos de su carrera al ser exaltado al Salón de la Fama de los Chicago Cubs, en una emotiva ceremonia en el Wrigley Field que marcó su reconciliación definitiva con la franquicia tras más de dos décadas de distanciamiento.
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El extoletero, ídolo en la histórica temporada de 1998 y uno de los grandes símbolos de la organización, agradeció el reconocimiento ante una multitud que lo ovacionó de pie.
“Me siento profundamente honrado y orgulloso de recibir este reconocimiento. Este no es solo mi honor, sino nuestro. Gracias por ser parte de esta historia”, expresó Sosa, quien recibió una cerrada aclamación de los fanáticos que aún corean su nombre en las gradas.
El homenaje incluyó un emotivo video titulado “legendary blues for a legendary player”, con imágenes de sus cuadrangulares y gestos característicos, mezclado con la música que identifica a Chicago. La organización también compartió un montaje con sus mejores jugadas para conmemorar el regreso de una de sus máximas figuras.
Sosa fue elegido en enero pasado junto a Derrek Lee para integrar el Salón de la Fama del club, luego de ofrecer una disculpa pública en diciembre de 2024, donde reconoció “errores cometidos” en su carrera, lo que abrió el camino para su reencuentro con la institución.
Con 609 cuadrangulares en las Grandes Ligas, 545 de ellos con el uniforme de los Cubs, el oriundo de San Pedro de Macorís dejó una huella imborrable en el béisbol estadounidense. Durante 13 temporadas en Chicago, se convirtió en referente de poder y espectáculo, ganándose un lugar en la memoria colectiva de la afición.
