Albert Traver

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Nueva York. Aryna Sabalenka prolongó este sábado su reinado en Nueva York al conquistar por segundo año consecutivo el Abierto de Estados Unidos, el cuarto ‘grande’ de su carrera, tras derrotar a la estadounidense Amanda Anisimova.

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Sabalenka, número 1 del mundo, se deshizo de Anisimova (número 9) por 6-3 y 7-6(3) en 1 hora y 34 minutos. Fue su primer ‘Grand Slam’ de una temporada complicada, en la que había perdido las finales en Melbourne y París.

En Wimbledon se quedó a las puertas de la final. Eliminada a manos de Anisimova, precisamente, que hasta la final de hoy en Nueva York le tenía tomada las medidas a la bielorrusa, habiéndole ganado 6 de sus 9 precedentes.

Para Anisimova, que es oriunda de Freehold Township, una ciudad dormitorio de Nueva York, esta final tenía un fuerte componente emocional. Era su redención, ocho semanas después de haber caído humillada en Wimbledon con un 6-0 y 6-0 propinado por la polaca Iga Swiatek.

Sabalenka no falla

Sabalenka se puso 2-0 en un arranque dubitativo de Anisimova, pero la estadounidense se sacudió rápidamente los fantasmas de Wimbledon, ganó los tres siguientes juegos seguidos y se encontró con una ventaja de ‘break’ arriba.

Jugadora de altibajos, su buen momento se esfumó de repente y vio cómo Sabalenka se llevaba los cuatro juegos siguientes para cerrar el primer set 6-3. La bielorrusa, muy firme, apenas cometió cuatro errores no forzados en todo el set, frente a los 15 de Anisimova.

Anisimova no empezó bien el segundo set y concedió otro ‘break’ en uno de sus primeros juegos. Sabalenka, por su parte, competía muy medida, con control, sin asumir riesgos innecesarios, viendo cómo a Anisimova se le iba escapando.

Con 5-4, Sabalenka tuvo la oportunidad de llevarse el partido con su servicio. Perdió los dos primeros puntos y le tocó remar. Anisimova logró con 30-40 restar para su supervivencia y logró el ‘break’ para alargar el partido.

Así, las dos llegaron al ‘tie-break’, con Sabalenka como absoluta favorita. La bielorrusa había ganado sus últimos 19 desempates seguidos y el de hoy no fue una excepción.

Sabalenka se puso con cinco pelotas de partido. Anisimova salvó las dos primeras al saque, pero la bielorrusa no perdonó más. La nacida en Minsk en 1998 cerró el partido con 76 golpes ganadores y solo 15 errores no forzados, por 59 y 29 Anisimova.

“Siento que hoy no luché lo suficiente por mis sueños”, reconoció Anisimova después de su derrota.

La reina de la pista rápida

Las lágrimas de alivio que Sabalenka derramó sobre la pista tras cerrar el encuentro reflejaron un año en el que había rozado la gloria sin poder abrazarla.

“Todas esas duras lecciones han valido la pena por este momento, ahora mismo estoy sin palabras”, dijo Sabalenka al terminar el partido, recordando sus finales perdidas.

La bielorrusa es la reina de la pista rápida. Ha disputado las 6 últimas finales en esa superficie (tres en Australia y tres en Estados Unidos), doble campeona en Melbourne (2023 y 2024) y en Nueva York (2024 y 2025).

Con su triunfo, se convierte en la primera tenista en conquistar dos años consecutivos el Abierto de Estados Unidos desde que Serena Williams lo logró en tres ediciones entre 2012 y 2014.

En Nueva York, Sabalenka reafirmó con autoridad su liderato en el ranking WTA, donde lleva 46 semanas consecutivas, y que comenzó el torneo amenazado por la polaca Iga Swiatek y la estadounidense Coco Gauff. La bielorrusa sale de Nueva York con 11.225 puntos, frente a 7.933 de Swiatek y 7.874 de Gauff.

Por su parte, Anisimova escala a la cuarta posición, la mejor de su carrera, con 5.159 puntos.

Más allá de la gloria deportiva, Sabalenka se embolsó un premio de 5 millones de dólares, el mayor jamás entregado en un ‘Grand Slam’. Anisimova recibirá 2,5 millones por haber llegado a la final. EFE