El ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Miguel Ceara Hatton, inspeccionó los avances en el cierre técnico y definitivo, por áreas, del vertedero de Duquesa.
Ceara Hatton explicó que los trabajos se realizan para identificar los sectores o áreas que se encuentren por debajo de la cota 60 y ejecutar labores de compensación para alcanzar dicha cota, liberando los espacios de los residuos dispuestos en el lugar, así como los que ingresan a diario.
En el proceso, los técnicos crean bermas en plataformas, las cuales servirán de camino de servicio cuando el lugar deje de operar como depósito de residuos. Cuando las obras hayan alcanzado la cota 60, utilizando materiales térreos y sanos, los especialistas y técnicos a cargo del proyecto darán cobertura final a las áreas que, en ese momento, ya estarán hábiles para ser clausuradas.
El ministro indicó que labores como la habilitación de circuitos o caminos interiores facilitan el tránsito de los vehículos recolectores a la construcción de plataformas de operación para la descarga y confinamiento de los residuos, así como a las infraestructuras ambientales para lograr una operación eficiente.
Las áreas ya clausuradas incluyen un perímetro de 86,365.55 metros cuadrados para ser utilizado como campo experimental en el que se desarrollan estudios y obras de infraestructuras ambientales, tales como el control de lixiviados, drenajes pluviales, sistema para el control de biogás, área de recreación y deportiva, a considerar, o forestación perimetral.
El proyecto, que aportará a una solución ambiental a un problema de décadas, cuenta con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).
Durante la visita, el ministro conversó con Armando Paíno Henríquez, del Consejo Directivo del Fideicomiso Público-Privado para Gestión Integral de Residuos Sólidos, y John Grullón, coordinador de la Comisión para la Administración y Operación del Vertedero de Duquesa.
Ceara Hatton resaltó que más de un 70 % del área impactada ha sido cubierta con materiales térreos, un proceso que busca reducir, hasta eliminar casi por completo, la posibilidad de que se produzcan incendios asociados a los desperdicios sólidos.
La iniciativa gubernamental contribuye, además, a reducir la generación de gases de efecto invernadero, previene la expansión de malos olores, limita la reproducción de insectos y animales que podrían perjudicar la salud humana, reduce los lixiviados y favorece la conservación del paisaje.