Ciudad de Panamá.- Las autoridades panameñas anunciaron este miércoles que el número de migrantes que atravesaron la selva del Darién en lo que va de año superaron los 200.000, una cifra inédita y que multiplica por cuatro los 49.452 que cruzaron esta frontera natural con Colombia en el primer semestre de 2022.
“La cifra de migrantes irregulares, que ingresan ilegalmente por las diversas trochas de la provincia del Darién, desde enero 2023 hasta este miércoles (…) registra un total de 201.167 personas”, informó en un comunicado el Ministerio de Seguridad Pública de Panamá.
Esto supone “un aumento considerable en comparación al primer semestre de 2022, cuya cifra fue de 49.452 personas”, anotó.
El total de migrantes que atravesaron la selva del Darién en 2022 fue de 248.284, un número sin precedentes hasta entonces y que se espera que este año se duplique si continúa a este ritmo el flujo de llegadas desde Colombia en su trayecto hacia Norteamérica.
Las autoridades panameñas advirtieron sin embargo de los peligros de cruzar esta selva y subrayaron “que aunque la migración es un derecho universal, es importante realizar la movilidad de forma regular, ordenada y segura”.
La selva del Darién es uno de los pasos más peligrosos del mundo, en el que a las amenazas naturales, con ríos crecidos, animales salvajes o la falta de agua potable por los cadáveres y los excrementos de los migrantes, se suman los ataques de criminales que roban, matan y violan a los cientos que atraviesan a diario el lugar.
Entre los migrantes que cruzaron el Darién en lo que va de año, más de la mitad son venezolanos (103.028), seguidos de haitianos (33.553), ecuatorianos (25.925), chinos (8.964) y colombianos (6.484). Otras nacionalidades numerosas son chilenos, indios o brasileños.
Este 2023, el mes que vivió un mayor flujo de migrantes en su travesía hacia Estados Unidos fue abril, con 40.297, seguido de mayo, con 38.962 y marzo con 38,099. En los primeros cinco días de julio atravesaron el Darién 4.796 personas.
Durante estos meses las medidas migratorias en Estados Unidos han ido cambiando.
Washington activó el pasado 11 de mayo nuevas restricciones migratorias, al finalizar el conocido como Título 42 y aplicarse en su lugar el Título 8, la norma que históricamente ha regido la migración en este país, a la que se sumaron otras medidas que restringen el acceso a pedir asilo en su frontera sur con México.
Panamá recibe a los viajeros irregulares que se dirigen a Norteamérica en estaciones migratorias situadas cerca de su frontera sur con Colombia y en la norteña con Costa Rica, donde les ofrece asistencia sanitaria y alimentación, en un operativo único en el continente que involucra a una docena de organismos internacionales.
El Darién es un parque nacional de Panamá de 575.000 hectáreas, declarado patrimonio de la humanidad en 1981. Según el registro de las autoridades panameñas, en 2019 entraron por esta vía 22.102 migrantes, 8.594 en 2020 y en 2021 otras 133.726 personas, un número en aumento que continúa.
El flujo migratorio sin precedentes en el continente americano se debe a la huida de miles de personas de crisis económicas y políticas, de la violencia o de los efectos del cambio climático en las poblaciones, y está vinculado al tráfico de personas, el negocio ilegal más lucrativo actualmente, según expertos internacionales. EFE