Bruselas. El alto representante para la Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, llamó a Serbia y Kosovo a restaurar “la calma” en la región tras los episodios de violencia de los últimos días y advirtió que la UE está “dispuesta a aplicar medidas firmes” en caso contrario.
“La violencia podría haberse evitado y debe evitarse en el futuro (…). La Unión Europea está dispuesta a aplicar medidas firmes”, indicó Borrell en un comunicado en el que condenó “en los términos más enérgicos los actos violentos contra los ciudadanos, las tropas de la KFOR, las fuerzas del orden y los medios de comunicación en el norte de Kosovo”.
La tensión estalló la semana pasada en el norte de Kosovo cuando manifestantes serbokosovares intentaron impedir la toma de posesión en los Ayuntamientos de los alcaldes albanokosovares que fueron elegidos en abril, en unos comicios que boicoteó la minoría serbia, con una participación de solo el 3 %.
El lunes se vivió un aumento de la escalada en los municipios de Zvecan y Leposavic con violentos choques entre los manifestantes serbokosovares y los soldados de KFOR -la misión que la OTAN tiene desplegada en Kosovo- que dejaron más de 80 heridos, 30 de ellos soldados.
Tras los incidentes, la Alianza Atlántica decidió desplegar 700 soldados adicionales en la zona.
“La Unión Europea respalda firmemente la misión KFOR de la OTAN y la misión EULEX de la UE en el cumplimiento de sus respectivos mandatos”, agregó Borrell, que avisó de que “si no se reducen las tensiones, se producirán consecuencias negativas”.
La UE instó “tanto a Kosovo como a Serbia a que tomen medidas inmediatas e incondicionales para reducir la escalada” de violencia y para que “dejen de usar una retórica divisiva y se abstengan de cualquier otra acción descoordinada”, dijo Borrell.
Borrell pidió a Kosovo que “suspenda de inmediato las operaciones policiales en las inmediaciones de los edificios municipales en el norte de Kosovo”.
“Los alcaldes deberán desempeñar temporalmente sus funciones en locales distintos de los edificios municipales. Las elecciones anticipadas deben anunciarse lo antes posible en los cuatro municipios y organizarse de manera totalmente inclusiva”, señaló el alto representante, que espera “que los serbokosovares participen en estas elecciones”.
El jefe de la diplomacia europea también trasladó a Belgrado “la preocupación por el estado de alerta máxima de las Fuerzas Armadas de Serbia”.
“La Unión Europea espera que tanto Kosovo como Serbia actúen de manera responsable y participen de inmediato en el Diálogo facilitado por la UE para encontrar una solución sostenible a la situación en el norte de Kosovo”, agregó.
Borrell, que lleva tiempo trabajando intensamente para lograr un entendimiento entre Serbia y Kosovo que devuelva la tranquilidad a la región, se ha reunido esta semana, por separado, con el primer ministro kosovar, Albin Kurti, y con el presidente serbio, Aleksandar Vucic.
Francia y Alemania han pedido a la parte kosovar que se celebren nuevas elecciones “sin demora” y a los serbokosovares su participación en los comicios, mientras que Estados Unidos ha avisado de que los disturbios “obstaculizan” el camino de esos países en su integración transatlántica.
“La calma necesita ser restaurada con urgencia”, agregó Borrell en la nota. EFE
