María Hernández
Cuidar a una mascota requiere de las mismas atenciones que cuando se deja a alguien a cargo de un niño o niña, con celo, previsión, seguridad y cariño.
Es la historia de un perrito llamado kunín al que sus dueños dejaron donde un vecino debido a un viaje que realizaron, al exterior.
El pequeño perro ha sido criado con mucha libertad, sale y entra de su hogar cuando quiere, pero, de todos modos, se nota un poco de tristeza en su mirada que da a entender que le falta algo. Les hacen falta sus dueños a los que echa de menos.
Sabe dónde se encuentra colocada su acolchada camita y por lo regular se acuesta a echar su pavita en horas de la tarde.
Una curiosidad es que no come a diario, sino interdiario. No acostumbra a ladrar mucho, solo cuando se acercan unos gatos vecinos a intentar cruzar a su patio e invadir su territorio.
El perrito es de la raza Chihuahua No.1 por lo que su tamaño no es tan grande y tiene colores negro y blanco. También hay perros No.0, No.2, No.3.
El perro le está cogiendo cariño al vecino, su única compañía, y le mueve la cola al hombre cada vez que entra a su casa a llevarle comida y agua.
Para hacer un poco de historia, se recuerda que el perro chihuahua es el más pequeño del mundo. Es originario de México, específicamente del estado de Chihuahua. En ese país los nombres de perritas más utilizados son Maia, Luna y Lola y de los perros Chilli, Tabo, Pazole, Pacho y otros.
Un chihuahua adulto puede medir entre 15 y 23 centímetros y su peso es de 1,8 a 2,7 kilogramos. Suelen vivir de 18 a 19 años. Pueden tener el pelo corto o largo y su color varía desde el blanco, café, negro, chocolate y beige o crema. Mantienen sus orejas erguidas, de manera natural. Unos tienen cabeza en forma de manzana y otros como mariposas. Son perros a los que les gusta que les presten atención y son muy fieles a sus dueños.
Dentro de los países que tienen este tipo de perro están México, Estados Unidos y España, aunque se han ganado el afecto de numerosos países del planeta, dentro de los que se encuentra la República Dominicana.
Para tratar a un perro de este tipo como mascota se necesita tener experiencia o un adiestramiento básico, de acuerdo a los expertos.
A los chihuahuas les gusta pasear de manera suave, no muy rápida, por lo menos media hora al día. Requiere aseo, por lo regular, una vez cada semana. Es un perro al que le gusta ladrar. Es un guardián a pesar de su diminuto tamaño. Siempre está alerta y suele convivir bien con otras mascotas sin importar si son perros o gatos. Es un perrito muy familiar. Son animales muy limpios si se les educa.
Tener una mascota es un compromiso que se asume por lo que se le debe dedicar todo el tiempo que requieran y tratarlos con sumo cuidado porque tienen los sentidos bastante desarrollados y son capaces de detectar quienes de la casa les tratan bien y quienes no.
Esta semana, los dueños del perrito llegaron, pero el animalito se ha quedado con la confianza de visitar la casa que le dio calor cuando lo necesitó y procurar los pedazos pequeños de carne que se acostumbró a comer en vez de su cotidiana comida especial para perros.