25.8 C
Santo Domingo

La Procuraduría como trofeo

Carlos Manzano

Un trofeo es un objeto, generalmente de carácter decorativo, que se otorga como reconocimiento o premio a una persona, equipo o entidad por lograr algún tipo de éxito, victoria o mérito en una competencia, evento deportivo, concurso o cualquier otra actividad destacada en la sociedad.

El concepto de trofeo abarca una amplia gama de elementos simbólicos que se otorgan para reconocer algún logro destacado en cierta área del saber, algún esfuerzo, una dedicación, no sólo en el ámbito deportivo, sino también en otros campos como la cultura, la academia, el arte y la sociedad en sentido general.

Con la reciente designación de la Lic. Yeni Berenice como nueva Procuradora General de la República, el gobierno le entrega a dicha Magistrada esa institución como trofeo o reconocimiento por los grandes aportes hechos para la reelección del Presidente Abinader y el mantenimiento del PRM como partido de gobierno.

No cabe la menor duda de que Yeni fue la figura principal en la estrategia del gobierno de utilizar la justicia, a través del Ministerio Público, como herramienta para destruir al mayor partido de la oposición, en ese entonces, el PLD, mediante una persecución atroz y despiadada contra antiguos funcionarios de los gobiernos del PLD, sobre todo, los encabezados por el Lic. Danilo Medina.

Esa persecución, muchas veces sin ningún tipo de disimulo, llegó hasta algunos familiares de Danilo Medina, y los más cercanos de sus colaboradores, lo cual les sirvió a los estrategas del gobierno para montar una campaña mediática para desacreditar y deteriorar la imagen de esa organización política.

Esa campaña de descrédito en contra del PLD, hizo que la población prontamente sintiera rechazo por esa organización política, hasta llevarlo a obtener una votación pírrica en las últimas elecciones del 2024, olvidando todos los logros y legados dejados en favor del pueblo por ese Partido.

Ese fue el propósito, desde el inicio, por parte del Presidente Luis Abinader cuando en uno de sus primeros Decretos (creo que el primero) nombró a la Lic. Yeni Berenice como Procuradora Adjunta, Directora General de Persecución de la Corrupción del Ministerio Público.

Desde el momento mismo en que fue designada la Lic. Yeni Berenice en esa posición, me di cuenta de que realmente no existía voluntad de parte del Presidente Luis Abinader para llevar a cabo políticas públicas que, de manera efectiva, pudieran prevenir y combatir la corrupción administrativa en nuestro país.

Ello así porque con los disgustos y desavenencias que tuvo la Lic. Berenice con el gobierno de Danilo Medina, y el exprocurador Jean Alan Rodríguez, la persona menos indicada para ocupar ese cargo era ella, al menos que el gobierno tuviera el marcado interés, aprovechando esa coyuntura, de utilizarla en su despropósito de destruir al PLD.

Lo que ha venido aconteciendo en los últimos cuatro años con los criterios selectivos empleados por el Ministerio Público en la persecución de la corrupción sólo contra funcionarios de las dos últimas gestiones del PLD, de alguna forma, viene a corroborar lo que aquí planteamos.

Es penoso decirlo, pero en los últimos años hemos sido testigos del auge que ha venido teniendo en nuestro país el uso de la Justicia como instrumento de combate político, es decir, como arma que algunos actores políticos, desde el Poder, utilizan para conseguir, con frecuencia de forma ilegítima, objetivos que se les dificultaría lograr políticamente por la vía democrática.

Al momento de augurarle éxitos a la Magistrada Yeni Berenice en su nuevo cargo como Procuradora General de la República, confiamos en que pueda hacer un buen trabajo desde allí, y, sobre todo, que se empeñe, esta vez, en alcanzar un trofeo del pueblo dominicano, no ya como persecutora, sino más bien como buena gestora.

Previous article
- Advertisement -spot_img

Más artículos como este