José Carlos Móvil
Ciudad de Guatemala.– La calma ha vuelto este viernes a Guatemala, al menos de manera temporal, después de dos días de alta tensión por el riesgo de suspensión en la segunda vuelta electoral del candidato presidencial socialdemócrata Bernardo Arévalo de León, a petición del Ministerio Público (Fiscalía).
La situación, sin embargo, sigue siendo inquietante para la agrupación política de Arévalo de León, el Movimiento Semilla, pues el Ministerio Público aseguró este mismo viernes que los seguirá investigando.
Al mismo tiempo, crece la presión social, después de que miles de manifestantes protestaran contra la sede del Ministerio Público hasta altas horas de la noche del jueves para pedir la renuncia de la fiscal general y jefa del Ministerio Público, Consuelo Porras.
A ellos se sumaron este viernes autoridades indígenas que frente al Tribunal Supremo Electoral exigieron respeto a los resultados electorales.
“Como autoridades indígenas y ancestrales, estamos sumamente preocupados por las acciones espurias que el Ministerio Público dirigido por Consuelo Porras”, aseveraron en una carta abierta.
“Son delitos graves los que pueden entenderse como actos de sedición”, añadió el documento, leído por uno de los portavoces del colectivo Autoridades Indígenas Ancestrales de Iximulew.
Porras fue sancionada en 2021 por Estados Unidos con la prohibición de entrar a su territorio al acusarla de “socavar” la Justicia en el país centroamericano.
Desde Semilla, que empezó este viernes la campaña política con miras al balotaje del 20 de agosto, no descartan que el Ministerio Público continúe con los intentos de remover la candidatura de Arévalo de León e incluso de realizar capturas de sus miembros.
Los comicios del pasado 25 de junio fueron ganados por la ex primera dama Sandra Torres Casanova, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), como todas las encuestas anunciaban.
Sorpresivamente, el segundo lugar fue Arévalo de León, a quien los sondeos colocaban en séptimo u octavo puesto, y Semilla se acreditó de igual forma 23 diputados de los 160 que componen al Congreso, convirténdose así en la tercera fuerza del parlamento.
El Movimiento Semilla nació de las manifestaciones anticorrupción en el país centroamericano durante 2015 y entre sus principios está la justicia social y el cese a la impunidad.
DOS DÍAS DE TERREMOTO POLÍTICO
El pasado miércoles, el Ministerio Público causó un terremoto político en el país centroamericano al acusar a Semilla de corrupción por un supuesto caso de firmas falsas e intentar suspender la candidatura de Arévalo de León.
Sin embargo, el jueves, la Corte de Constitucionalidad, máximo tribunal de Guatemala, anuló legalmente la solicitud de la Fiscalía de suspender a Semilla de las elecciones y de igual forma el Tribunal Supremo Electoral indicó que no tomaría en cuenta la acción del Ministerio Público.
La investigación en contra de Semilla está a cargo del jefe se sección Rafael Curruchiche, también sancionado (en 2022) por Estados Unidos con el retiro de su visa bajo cargos de crear falsos casos en contra de exautoridades.
Curruchiche es el mismo fiscal que comandó las investigaciones en contra del periodista José Rubén Zamora Marroquín, detenido el 29 de julio de 2022 por un supuesto caso de lavado de dinero, solo cinco días después de lanzar fuertes críticas de corrupción al Gobierno que preside Alejandro Giammattei.
El juzgado séptimo penal que avaló las intenciones del Ministerio Público en contra de Semilla, Fredy Orellana, también ha manejado uno de los casos imputados a Zamora Marroquín, reconocido por su labor periodística a nivel nacional por las últimas tres décadas.
Torres Casanova y Arévalo de León disputarán el próximo 20 de agosto la segunda vuelta electoral para definir al presidente del país centroamericano para el período 2024-2028. EFE