Rosmerys De León
Una jueza envió este jueves al cabo que mató a cuatro personas en Los Alcarrizos a cumplir prisión preventiva en el centro de Operaciones Especiales.
Tras conocer la audiencia de medida de coerción, la magistrada Cecilia Toribio, de la Oficina de Atención Permanente de Santo Domingo Oeste, decidió que Esteban Javier Cora se mantenga recluido en la cárcel especial para policías, ubicada en Manoguayabo, mientras se conoce su proceso judicial.
El imputado fue conducido al tribunal cargado por agentes penitenciarios debido a que se recupera de un disparo en una pierna, que recibió en circunstancias aún no esclarecidas.
La abogada de la parte querellante dijo que la magistrada dispuso que el agente adscrito a la Dirección General de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett), imputado por matar a su expareja, la madre y hermana de esta, como también a un hombre, esté recluido en este centro debido a que es un policía activo.
“Es que la ley le confiere, no es que él quiere, de querer hubiese sido en el 15 de Azua, lo que sucede es que hay que respetar la norma y nadie está por encima de la ley, la ley dice que es un miembro activo de la policía es ahí que le corresponde cuando se comete un hecho”, precisó la jurista Mari Valenzuela, quien representa a la familia de las víctimas y trabaja para el Ministerio de la Mujer.
Los familiares de Indira de la Cruz, de 19 años (expareja del imputado), Marianeli Rosario, de 36; Paola de la Cruz, de 16, y Liren Méndez Báez se mostraron inconformes con la decisión de la jueza de enviar al imputado a un centro especial para policías y no a una cárcel común.
El cuádruple asesinato ocurrió la noche del sábado 20 de agosto, en la calle primera del barrio La Fe en el municipio Los Alcarrizos, cuando el agente se presentó a la casa de su expareja Indira de la Cruz a buscar a los dos niños que procrearon juntos, lo que fue impedido por esta porque se encontraba en estado de embriaguez.
La acción provocó que el cabo disparara en contra de la joven de 19 años, de su exsuegra Marianeli Rosario de 36 y su excuñada Paola de la Cruz de 16.
Las balas del hombre de 31 años también hirieron a su hijo de cuatro, que sufrió heridas leves en la cabeza.
Las investigaciones establecieron que luego de cometer el triple asesinato, el oficial se marchó a su residencia y mientras trataba de escapar mató a la persona que lo perseguía identificada como Liren Méndez Báez en el puente de Los Rieles.
Indira estaba separada de Cora desde hace un año y volvió a casa de su madre para rehacer su vida. Sin embargo, de acuerdo a Gladys de la Cruz, tía de la fallecida, la fémina vivía en estado de desasosiego porque era constantemente acusada por su victimario