Teherán.- El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, afirmó este domingo que está tratando de prevenir la repetición de la guerra mediante el “fortalecimiento de la vía diplomática”, aunque advirtió que su país no aceptará “presiones ni actos de intimidación”.
“Estamos tratando de prevenir la repetición de guerras y conflictos, impulsando la diplomacia”, declaró el mandatario iraní durante una reunión en el Ministerio de Petróleo del país, según informó la agencia IRNA.
Pezeshkian subrayó que “la guerra no beneficia a nadie y nunca tiene un vencedor”, por lo que aseguró que su Gobierno se esfuerza por “avanzar hacia la paz, la tranquilidad y la estabilidad”.
El presidente iraní indicó que, para ello, su administración se basa en la “cohesión interna y la amistad con nuestros vecinos y otros países del mundo”.
“Nunca hemos intimidado, ni intimidaremos, pero tampoco nos someteremos a la fuerza ni a la intimidación de ninguna manera”, sostuvo Pezeshkian.
Estas declaraciones se realizaron un día después de que el ministro de Exteriores iraní, Abás Araqchí, afirmara que Irán no teme volver a la mesa de negociaciones nucleares con Estados Unidos.
Sin embargo, Araqchí denunció la “traición a la diplomacia” por parte de Washington al girar hacia la vía militar en medio del proceso negociador que las partes comenzaron el 12 de abril pasado.
“Eso fue una traición, no solo contra Irán, sino contra la diplomacia misma”, criticó Araqchí.
El ministro iraní aseguró que su país ha recibido “múltiples mensajes” de interés por parte de EE. UU. para reanudar las negociaciones. No obstante, exigió “garantías razonables” de que no se volverá a recurrir a la presión militar como alternativa en caso de que el diálogo no satisfaga a la parte contraria.
Irán fue atacado la madrugada del 13 de junio por Israel, en una guerra que duró 12 días y en la que murieron unas 1.000 personas, incluidos decenas de altos cargos y científicos nucleares del país persa, que respondió a la ofensiva con el lanzamiento diario de misiles contra territorio israelí.
El 22 de junio, Estados Unidos también se involucró en el conflicto al bombardear las instalaciones nucleares iraníes de Fordó, Natanz e Isfahán.
Dos días después, la guerra finalizó con el anuncio de un alto el fuego por parte del presidente estadounidense, Donald Trump. EFE