Gran parte de los derrumbes, accidentes y vicios de construcción en las edificaciones residenciales y comerciales se deben a que los constructores y desarrolladores no llevan una adecuada supervisión técnica de las obras.
Así lo aseguró el arquitecto Edgar Martínez, exsecretario general del Colegio de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (Codia) y presidente de un grupo empresarial de la construcción, quien dijo que hay ineficiencias en el control de la a calidad y las obras se supervisan de forma superficial.
“Otro elemento es el incumplimiento de las normativas y esto conduce a que las edificaciones se levanten sin escaleras contra incendios, con materiales diferentes a los especificados por cada construcción y no cumplan lo que exigen los organismos competentes”, afirmó.
Sostuvo que otras de las fallas muy recurrentes se identifican en la documentación, permisos y especificaciones técnicas que deben observarse.
Martínez, quien es arquitecto con posgrado en administración de la construcción y especialidad en supervisión de obras, puntualizó que las empresas constructoras y desarrolladores se resisten a sumar equipos de supervisión técnica de obras porque entienden que es un gasto adicional.
“Los desarrolladores se resisten a contratar supervisión porque significa un costo para ellos, pero los beneficios son inmensos en la prevención de vicios, reclamos y demandas en los tribunales”, manifestó Martínez, quien es presidente del consejo de administración del EM+A Group, firma del sector construcción.
Refirió que, en casos de derrumbes, el código 1792 del Código Civil establece responsabilidad civil para los desarrolladores y constructores por un tiempo de 10 años a partir de la finalización de la obra.