El sector hotelero de República Dominicana genera 106,891 empleos, lo que equivale a RD$37,595 millones en salarios anuales pagados.
Esa cifra solo incluye al sector formal y solo los hoteles, por lo que si se suma a los bares, restaurantes y establecimientos no hoteleros se pudiera multiplicar esa cifra por tres o cuatro
Los datos están contenidos en el estudio sobre “Encadenamientos productivos del sector hotelero en la economía de la República Dominicana”, presentado ayer por el Banco de Reservas y la Asociación Nacional de Hoteles y Turismo (Asonahores). La investigación muestra el impacto del citado ramo en toda la cadena de valor de la economía.
Roberto Despradel, de la firma DASA, que realizó la investigación respaldada por el Banco de Reservas y Asonahores, indicó que en 2022 la industria hotelera creó 113,842 empleos indirectos, lo que representó pagos en salarios anuales por RD$37,578 millones.
Además, se realizaron compras por más de 139 millones de pesos en el mercado nacional en el 2022, para un aumento de más de 40% respecto al 2021, dentro de las cuales se citaron los ejemplos de electricidad, gas y agua con más de 16 mil millones, en construcción más de 12 mil millones y más de 3 mil en ganadería y agricultura.
Samuel Pereyra, presidente ejecutivo de la institución financiera; y David Llibre, presidente de la Asociación de Hoteles y Turismo, resaltaron la importancia de la investigación, que abarca un gran espectro de la incidencia de los establecimientos hoteleros en la economía nacional, y que revela que en los últimos diez años los hoteles han aportado alrededor del 11% del sector servicios del Producto Interno Bruto (PIB).
“El sector hotelero genera encadenamientos productivos con otras actividades económicas vitales para el desarrollo de las empresas locales que suplen de bienes y servicios”, agregó Despradel.
El presidente ejecutivo de Banreservas subrayó que el estudio patrocinado por la institución financiera “refleja los efectos positivos de fomentar el crecimiento sostenido de las cadenas de valor que intervienen, tanto en el sector turismo como en otras industrias complementarias”.
Pereyra agregó que “oportunas políticas gubernamentales de apoyo al turismo determinan una notable contribución, al realizar múltiples financiamientos a empresas del sector, en especial a proyectos turísticos que añaden valor como la construcción de grandes hoteles y villas, que son clave para la creación de empleos y riquezas en las demarcaciones donde operan”.