El economista Henry Hebrard entiende que tras finalizar el proceso electoral, en una nueva gestión gubernamental, las autoridades que asuman los destinos del país para el periodo 2024-2028 deben abocarse en reformas necesarias de caras a mejorar la economía y la distribución de la misma cuando a inclusión se refiere.
Manifestó que por muchos años se tuvo una obsesión con el crecimiento del PIB, aspecto que entiende estaba bien en ese momento porque se necesitaba crecer, pero que volver al tipo de crecimiento desde antes del covid no es lo más factible en la actualidad porque esto no permitiría que mucha gente pueda beneficiarse del crecimiento.
Para Hebrard lo que necesita República Dominicana es una reforma fiscal, no una tributaria, ya que esta busca solamente aumentar ingresos, básicamente subiendo tasas y eso no contribuye a la inclusión ni a la expansión de los beneficios del crecimiento hacia sectores que lo necesitan.
“Desde el 2004 he estado envuelto con los sistemas y tengo la convicción de que en este mismo momento de la economía dominicana, si lo que se busca es aumentar ingresos, solamente incrementando tasas, esa es la autopista hacia el desastre”, advirtió el economista.
Apuntó que muchas veces el que está en la informalidad lo hace porque no le queda otro remedio, pero que es importante hacerles entender que tendrá mayores beneficios si se formalizan, pero que nadie va a formalizarse a nivel micro cuando hay una tasa de impuesto sobre la renta del 97 %.
“Seamos conscientes de eso, veamos la experiencia de otros países. Más del 80 % de nuestras empresas son pequeñas y tienen la capacidad de mover y de ser excelentes proveedores para las empresas medianas y grandes, pero necesitan tener buenos proveedores y que el Estado apoye a esos pequeños negocios”, precisó Hebrard, quien también manifestó que se requiere que le paguen puntualmente.
Expresó que además de bajar la tasa porque es alta, a lo que se suma que casi todos los días hay que hacer un reporte, hay que ver el tema del anticipo porque este está matando el flujo de caja de las empresas: “y uno descubre como emprendedor que lo único que importa es el flujo de caja, no es tener beneficio”.
“Esto yo creo que va a ser fundamental, y en ese sentido, entiendo que en la parte de los ingresos tiene que haber una discusión amplia para definir los qué; que haya objetivos de la reforma, las métricas en las que se quiera llegar y el tiempo”, dijo.
Durante su participación en el programa Reseñas, que conducen los periodistas Rafael Núñez y Adelaida Martínez R., Hebrard apuntó que, por ejemplo, todo el mundo podría estar de acuerdo en bajar la tasa de evasión del itbis en un 15 % o 20 %.
“Pongámonos de acuerdo en eso, naturalmente, si hay acuerdo en esto, después, aunque haya disensos en los cómo, este cómo está en línea con los objetivos de los gastos, los ingresos, activos y pasivos, por eso la reforma debe ser fiscal”, reiteró.
Para Hebrard es fundamental entender que las reformas tienen que ser para crecer más, pero sobre todo para crecer mejor.
“Este desafío se nos está presentando, no a la clase política, es a la sociedad dominicana porque a fin de cuentas, en una sociedad participativa, como es el caso de República Dominicana, la sociedad debe estar clara de hacia dónde quiere ir y en función de eso le da el mandato a los políticos”, precisó Hebrard, quien dijo que si aplica una reforma fiscal, el país puede hablar de que el crecimiento potencial no es 5 %, sino 6 % o 7 %.
Finalmente, dijo que República Dominicana tiene que hacer una reforma que permita que haya una inclusión y que nadie se quede de camino.