Lency Alcántara
En tiempos donde la creatividad culinaria se ha convertido en un refugio cotidiano, cinco salsas caseras están conquistando los hogares dominicanos por su facilidad, versatilidad y explosión de sabor.
Desde el almuerzo familiar hasta la cena improvisada, estas preparaciones se han vuelto aliadas infalibles para transformar cualquier plato en una experiencia gourmet.
Salsa de Tomate Casera

La reina de la cocina italiana ahora tiene su versión dominicana. Con tomates frescos, ajo y albahaca, esta salsa se ha convertido en el comodín perfecto para pastas, pizzas y guisos. Su preparación sencilla y su sabor profundo la hacen imprescindible.
Salsa de Yogur y Hierbas
Ligera, refrescante y saludable. Esta mezcla de yogur natural con perejil, ajo y limón es ideal para ensaladas, wraps y como dip para vegetales.
Su popularidad ha crecido entre quienes buscan opciones más ligeras sin sacrificar sabor.
Salsa de Aguacate

El aguacate, tesoro caribeño, se reinventa en esta salsa cremosa con cilantro y limón.
Perfecta para tacos, burritos y carnes a la parrilla, su textura sedosa y sabor suave la han convertido en favorita de los fines de semana.
Salsa Pesto
Aunque originaria de Italia, el pesto ha encontrado su lugar en la cocina local. Con albahaca, ajo, queso parmesano y aceite de oliva, esta salsa potencia el sabor de carnes, vegetales y pastas. Su aroma y color vibrante la hacen irresistible.
Salsa de Soya y Jengibre

Ingredientes:
1/2 taza de vinagre blanco
1/2 taza de azúcar
1/4 taza de ketchup
1 cucharada de salsa de soya (opcional para un toque umami)
1/2 cucharadita de maicena (para espesar)
1/4 taza de agua (si es necesario)
Preparación:
1. En una sartén o cacerola pequeña, mezcla el vinagre blanco, el azúcar y el ketchup.
2. Cocina a fuego medio, revolviendo constantemente, hasta que el azúcar se disuelva completamente y la mezcla comience a calentar.
3. Si deseas que la salsa tenga un toque de umami, agrega la salsa de soya en este momento y mezcla bien.
4. En un recipiente aparte, disuelve la maicena en un poco de agua fría (aproximadamente 1/4 taza) hasta obtener una mezcla suave.
5. Agrega la mezcla de maicena a la sartén con la salsa caliente y sigue revolviendo. Cocina a fuego bajo hasta que la salsa espese, lo que debería tomar unos 2-3 minutos.
6. Si la salsa está demasiado espesa, agrega un poco más de agua hasta alcanzar la consistencia deseada.
7. Retira del fuego y deja enfriar. La salsa se espesará aún más al enfriarse.