Dilenny Bonilla
El futuro del cacao en el mercado internacional se convierte en una notificación para los 40 mil productores locales de que es necesario elevar el rendimiento y sostenibilidad de la producción.
Más allá de las ganancias temporales que perciben por el alza de este grano, las alzas históricas dejan ver que el cambio climático es una realidad y también puede afectar a los criollos .
Similar como pasó en el principal productor de ese grano, África, donde se originó el incremento incidido por el clima y la complejidad del mercado futuro.
De hecho, a nivel local los problemas de sequía menguó la producción en un 50 %, aunque en términos económicos no se refleja porque ha sido compensado por los incrementos de precio.
En la actualidad, el quintal de cacao se encuentra entre RD$15,000 y hasta RD$16,000 cuando eran entre RD$7,000 y RD$10,000.
En ese sentido, Francisco López de Roid Agrocacao, explica que es momento de que los productores de cacao se reinventen e innoven de manera que cuando los factores que alimentan la volatilidad desaparezcan los locales puedan competir con los grandes productores. Resalta que la clave está en elevar la calidad de la producción con cacao especial.
“Al ser nuestra producción tan poco a nivel global, la calidad es superimportante; se debe estar certificado en programas de calidad, sociales, medioambientales. Eso nos ayuda a ingresar a nichos de cacaos especial”, destaca al continuar diciendo que la calidad y las características organolépticas es la principal bandera del cacao dominicano a nivel internacional.
El experto, enfatiza que eso implica aplicar mejores prácticas agrícolas, niveles de secado y mantener altos estándares de higiene y calidad en los procesos.
Aprovechar el mercado
Para aprovechar el mercado, se debe estar claro de que los productores locales en su mayoría son cosecheros que invierten cantidades mínimas en su producción, y tiene sembrado en pequeños terrenos con no más de 40 árboles cuando el marco de plantación es de 70.
En ese sentido, Francisco López entiende que se requiere aplicar tecnología y completar los marcos de plantación con clones comprobados de resistencia a situaciones climáticas y enfermedades, para garantizar una producción que podría duplicarse en un lapso corto de tiempo.
“También se debe aplicar la agroforestería: se necesita tener cultivos adicionales como jengibles, cúrcuma, plátanos, guineos, zapotes, y aguacate, los cuales son comerciales y no compitan con el cacao y así proporcionará una ventaja de competitiva”, manifestó al recomendar a los productores establecer alianzas estratégicas con empresas chocolateras para hacer chocolates de denominación de origen, hacer inversiones en tecnología, pruebas sanitarias, insertar clones de plantas más resistentes a enfermedades.
Asociación
Conocer el mercado y recibir asesoría en marketing y producción en estos momentos es primordial, dice Juan Brito de la oenegé de la Confederación Nacional de Cacaocultores Dominicanos (Conacado), y ve necesario que los productores se asocien y planifiquen su producción. Cuenta que eso hubiera evitado que decenas de productores hoy tengan que vender cacao a precios más bajos por contratar ventas futuras sin analizar el mercado. “Nosotros orientamos a decenas de productores de cacao a que no contrataran su cosecha para que se aprovecharan de las alzas que veíamos venir desde el pasado año”, dijo.
Cuenta que más de 7 mil productores pequeños están ahora aprovechando de los incrementos de precios, pero que también se preparan para expandir su producción incentivados por las jugosas ganancias temporales que experi
País tiene una 36 mil fincas de cacao
En República Dominicana hay alrededor de 2,4 millones de tareas sembradas de cacao a cargo de alrededor de 40,000 productores, con 36,236 fincas registradas, de las cuales el 16.5 % se dedican a la producción de cacao orgánico, según Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura.
Explica que uno de los principales problemas que enfrentan los productores de cacao son los bajos niveles de productividad de sus terrenos requiriéndose la inversión significativa de recursos para mejorar las plantaciones.