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NUEVA YORK — Los Yankees mantuvieron la calma durante su racha de seis derrotas consecutivas, con el capitán Aaron Judge afirmando que estaban “decididos a ganar el próximo pitcheo” y el gerente general Brian Cashman asegurando que “la tormenta pasará, más temprano que tarde”. Consideren esto una apertura entre las nubes que ilumina lo que fue una semana oscura en el Bronx.
Trent Grisham y Paul Goldschmidt conectaron jonrones consecutivos en la segunda entrada, y los Yankees rompieron su mala racha la tarde del jueves al evitar la barrida con una victoria por 7-3 sobre los Angelinos en el Yankee Stadium.
Conseguir la ventaja había sido un problema para los Yankees, que sólo habían estado al frente en la pizarra en la conclusión de un solo inning — el cuarto episodio del miércoles ante los Angelinos— durante una seguidilla que incluyó una racha de 30 entradas sin anotar.
Eso cambió con el cuadrangular de dos carreras de Grisham ante Tyler Anderson, el bambinazo de Goldschmidt que pasó justo por dentro del poste de foul del jardín izquierdo y una actuación de tres hits y una impulsada de Cody Bellinger. Con ese respaldo, Carlos Rodón tuvo lo suficiente para salir adelante pese a permitir tres jonrones en solitario en una labor aguerrida de seis capítulos para apuntarse el triunfo.
El éxito de Rodón en la última temporada y media se ha basado principalmente en limitar el daño; los cuadrangulares en solitario no son ideales, pero son mejores que ataques grandes. Mike Trout, Jo Adell y Taylor Ward se volaron la cerca ante Rodón, quien sólo permitió otro imparable — un infield hit de Christian Moore— mientras ponchaba a siete con una base por bolas.
Tal vez la mejor señal de que la fortuna de los Yankees podría estar cambiando se dio en el octavo inning, cuando Logan Schanuel conectó un batazo en línea con destino al jardín central. El nicaragüense Jonathan Loáisiga intentó atraparla, pero su guante cayó al suelo y la bola terminó en manos de DJ LeMahieu en la intermedia para completar el out.
Tras reaccionar inicialmente como si se hubiera ponchado en una bola de foul, Judge pegó un doble que encendió un ataque de dos carreras en el octavo capítulo, su primer extrabase desde el jonrón del viernes pasado ante Garrett Crochet, de los Medias Rojas, en Fenway Park. Judge está de 27-3 con 16 ponches en sus últimos ocho encuentros.
