Frankelvin Sánchez

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En cada kilómetro de carretera, detrás de cada conductor que respira aliviado tras una avería o un accidente, y en cada familia que logra llegar segura a su destino, hay un cuerpo silencioso, disciplinado y en movimiento constante: la Comisión Militar y Policial (Comipol) del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).

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Con el Plan de Protección y Asistencia Vial, la institución ha tejido una red nacional de vigilancia, seguridad y ayuda inmediata en las vías, convertido en un sistema que, más que números, salva vidas todos los días.

La Comipol opera hoy con una impresionante flotilla de 288 unidades vehiculares, entre patrullas, motocicletas, ambulancias, talleres móviles, grúas, camiones y equipos especializados de rescate. Su presencia se extiende a lo largo de 3,278 kilómetros de carreteras, donde estos vehículos se han vuelto un símbolo de tranquilidad para quienes transitan.

Son 1,042 agentes por día, distribuidos en varios turnos, que recorren autopistas, avenidas y tramos remotos. Ellos son los primeros en llegar cuando un neumático estalla, cuando un motor falla o cuando una emergencia médica amenaza la vida de un ciudadano.

De acuerdo a los datos oficiales obtenidos a través del Portal Único de Solicitud de Acceso a la Información Pública (SAIP), la Comipol atiende en promedio 678 asistencias diarias, 20,609 cada mes y alrededor de 247,308 al año.

Son cifras que hablan de un país en movimiento y de un servicio que ha logrado mantener estabilidad en su cobertura durante sus años de existencia. El Gobierno segura que la calidad de las asistencias aumentó en un 8% en los últimos cinco años.

Las causas más frecuentes son tan cotidianas como peligrosas: 44% fallas mecánicas, 31% problemas con neumáticos, 13% falta de combustible, 2% emergencias médicas o accidentes, 10% otras necesidades de apoyo.

La carrera contra el tiempo

Antes de la ampliación del programa, la respuesta promedio tardaba 23 minutos. Hoy, esa misma distancia se recorre en 18 minutos, un margen que, según los propios registros del organismo, ha significado salvar vidas. Se estima que el 33% de las intervenciones ha evitado consecuencias fatales.

Este impacto se refleja también en la reducción de accidentes. Los tramos donde opera la Comipol registran una disminución del 23% en incidentes viales, cifra que confirma el efecto real de esta presencia constante.

Los tramos más críticos

Los agentes identifican rutas donde el servicio se vuelve más intenso y en las que cada día se libra una batalla contra el tiempo y la imprudencia. Entre ellas: Cibao Sur Tramo 1 y 2, Circunvalación Norte, Tramo Samaná, Punta Cana, El Coral y Sureste Tramo 1.

Solo en lo que va de año, se han atendido 2,672 accidentes, una cifra menor que los 3,319 del año anterior, de los cuales 52% requirieron atenciones médicas inmediatas.

El programa también responde al movimiento turístico del país: 11% de las asistencias corresponden a extranjeros. Y las líneas de comunicación no paran. Cada mes se reciben 3,130 solicitudes mediante el Call Center, marcando 511 y vía WhatsApp, lo que refleja la confianza en este sistema de apoyo.

Hasta ahora, según datos del SAIP, el 33% de la población dominicana ha utilizado en algún momento el servicio, un indicador de su alcance y relevancia.

Detrás de la eficiencia operativa hay un proceso intenso de formación. Este año, la Comipol impartió 199 capacitaciones, que beneficiaron a 4,199 miembros mediante cursos técnicos, talleres, conferencias y diplomados impartidos junto a academias militares, con el objetivo de preparar un cuerpo capaz de responder ante cualquier escenario.

El sistema presume de una operatividad del 99% en su flota vehicular, una eficiencia que permite sostener el ritmo de asistencias a nivel nacional. Desde un neumático reparado en la madrugada hasta el rescate de un herido, todo forma parte de una cadena diseñada para que la carretera sea un lugar más seguro.

En cada llamada, en cada auxilio, y en cada kilómetro patrullado, la Comipol reafirma la misión que inició de proteger al ciudadano en la vía. No importa si se trata de un conductor local, un turista, una familia en vacaciones o un motociclista que apenas empieza su día, para los agentes, todos merecen llegar sanos a su destino.

Cinco años de asistencia vial

La Comipol ha mantenido, durante los últimos cinco años, uno de los programas de asistencia vial más amplios y activos del país, inmplementado durante la gestión del entonces ministro Gonzalo Castillo. Sus servicios, que abarcan desde mecánica ligera, respuesta a accidentes, cambio de neumáticos, combustible y apoyo de grúas y ambulancias, se han convertido en un soporte esencial para miles de ciudadanos que transitan las carreteras nacionales cada día.

Los datos consultados en el Portal Nacional de Datos Abiertos, correspondientes al período 2020-2025, revelan un comportamiento de que la demanda de asistencia aumenta de manera acelerada en las temporadas de mayor movilidad, especialmente en Navidad, Año Nuevo, Semana Santa y otros días festivos. En esos períodos, el flujo vehicular se multiplica y las incidencias en carretera se disparan.

Aunque en 2020 solo se registraron los últimos tres meses (octubre-diciembre), las cifras ya evidenciaban la magnitud del operativo: mecánica (29,766 asistencias), neumáticos (22,225), seguridad (4,136), combustible (9,139), accidentes (1,903), grúa (1,411), ambulancia (1,138) y talleres (1,162). Este comportamiento mostró, desde el inicio de la gestión del presidente Luis Abinader, cuáles serían los servicios más demandados: mecánica y neumáticos, que reflejan las averías típicas de los desplazamientos largos de la temporada navideña.

El 2021 se convirtió en uno de los años más intensos en toda la historia reciente del programa. Con un año completo de registros (enero-diciembre), la Comipol alcanzó cifras extraordinarias: 122,153 asistencias mecánicas, 91,568 de neumáticos, 48,172 de seguridad, 29,778 por combustible, 6,201 accidentes, 3,823 grúas, 2,837 ambulancias y 7,437 servicios de talleres.

La reapertura total del país tras la pandemia COVID-19 impulsó una movilidad masiva, generando un aumento significativo en los reportes.

En 2022 la demanda se mantuvo elevada. Destacaron los 160,898 casos de neumáticos, seguidos por 59,615 de seguridad y 82,377 de mecánica, así como 52,493 asistencias por combustible. Ese año también se registraron 9,206 accidentes, además de más de 4 mil servicios de grúa y 2,764 de ambulancia.

Este fue el año en que el servicio de neumáticos alcanzó su punto más alto en los cinco años analizados.

Para 2023 se registró una disminución general en comparación con los años anteriores. Las asistencias cerraron en 46,639 de neumáticos, 32,979 en mecánica, 17,370 en seguridad, 7,268 en combustible, 2,571 accidentes, 1,457 servicios de grúa, 2,643 de ambulancia y 1,984 de talleres.

A pesar de la baja, el sistema mostró estabilidad en áreas críticas, como las ambulancias y las grúas, esenciales durante emergencias.

El año 2024 reflejó una continuidad en la reducción general de casos, aunque con un repunte importante en el uso de grúas. Las asistencias fueron: 33,584 neumáticos, 28,824 mecánica, 13,918 seguridad, 10,837 combustible, 2,616 accidentes, 2,826 grúas, 1,557 ambulancias y 3,514 talleres.

Estos números confirman que, aunque el comportamiento general descendió, la necesidad de respuesta rápida ante averías se mantiene constante.

En lo que va del año 2025 (enero-octubre), los datos ya muestran una tendencia clara. En solo diez meses se han registrado 22,016 asistencias de neumáticos, 19,274 mecánicas, 12,677 de seguridad, 7,573 por combustible, 2,559 accidentes, 1,992 servicios de grúa, 348 de ambulancia y 3,424 talleres.

El dato más llamativo es que las asistencias de neumáticos superaron las 22 mil antes de cerrar el año, lo cual confirma que este sigue siendo uno de los servicios más recurrentes en carretera.

Usuarios resaltan eficiencia

Diversos usuarios del programa de Protección y Asistencia Vial compartieron sus experiencias recientes, que destacan la rapidez, la seguridad y el trato humano recibido durante situaciones de emergencia en carretera.

Ernesto Rosario, quien vivió su experiencia en la autopista de Samaná, aseguró que el servicio fue “muy bueno”. Explicó que, tras quedarse sin combustible, los agentes acudieron rápidamente y le asistieron con amabilidad.

Otro usuario, Harold, relató que ha utilizado el servicio en dos ocasiones y en ambas recibió atención “superamable, colaboradora”, y resaltó además que los agentes “no pidieron dinero ni aceptaron propina”, algo que, según dijo, le generó confianza y agradecimiento.

Freddy de Paula también contó su vivencia: “Una vez me quedé en la carretera de Samaná y me rescataron en una grúa. Llevaron el vehículo al peaje más cercano y me dieron asistencia”.

Aclaró que aunque el programa no realiza mecánica profunda, sí resuelve situaciones básicas como problemas con neumáticos, agua para el radiador y otras fallas simples. “Y todo gratuitamente, ellos no cobran”, puntualizó.

De su lado, Modesto afirmó que “esa gente está en todos lados”, mencionó presencia en la carretera del Coral y en Punta Cana. Destacó que gracias a la asistencia, los ciudadanos se sienten más seguros. “A uno lo cuidan, cuidan el vehículo, lo remolcan si es necesario y no cobran nada”, agregó.

Otra experiencia fue la de Valentín Espinosa, quien ha utilizado el servicio dos veces: la primera por una goma pinchada y la segunda por un problema de batería. “Me cambiaron la goma totalmente y no aceptaron propina. La segunda vez llegaron dos agentes y se quedaron conmigo hasta que llegó mi papá a asistirme”, relató. “En verdad uno quiere agradarlos, pero ellos no aceptan dinero”.

Luis Rodríguez también vivió un caso en la autopista Duarte, donde se le dañó el vehículo. Aunque tardó en comunicarse al principio, reconoció que una vez logró hacerlo, la atención vía WhatsApp fue inmediata. “Les expliqué el problema mecánico que tenía y se mantuvieron acompañándome hasta que llegó la grúa”, narró.

El dato más llamativo es que las asistencias de neumáticos superaron las 22 mil antes de cerrar el año

Testimonios como estos reflejan la importancia del programa de Asistencia Vial, no solo como un servicio técnico, sino como un apoyo humano que brinda tranquilidad y protección a miles de conductores cada día en las carreteras del país.

Más de 2,500 agentes en las vías

El director de la Comisión Militar y Policial (Comipol), coronel Luis Rafael Herrera Almonte, informó que para este operativo de Navidad la institución cuenta con el personal técnico y el equipo necesario para brindar asistencia en el menor tiempo posible a los ciudadanos que transiten por las principales vías del país.

Herrera Almonte detalló que el operativo dispondrá de 2,500 efectivos distribuidos en todo el país, con especial presencia en los puntos de mayor circulación.

“Tendremos más prioridad en la Autopista 6 de Noviembre, la Autopista Duarte y varios tramos de la avenida Las Américas, donde históricamente se registra un mayor flujo vehicular durante estas fechas”, afirmó.

El director de la Comipol hizo un llamado a la ciudadanía a conducir con responsabilidad durante el período navideño.

“Cada ciudadano debe asumir el compromiso de mantener la prudencia y observar las señalizaciones de tránsito para evitar llevar luto a las familias”, enfatizó.

En apoyo a este operativo, el director del Fideicomiso RD-Vial, Hostos José Rizik Lugo, destacó la inversión que se está realizando para fortalecer la seguridad vial en el país.

A través de un comunicado, informó que su gestión ya entregó a la Comisión Militar y Policial (Comipol) 60 de las 100 unidades patrulleras que serán incorporadas este año al programa de protección y asistencia en carretera.

Somete proyecto de ley para unificar Comipol

El diputado Rafael Tobías Crespo Pérez informó que fue sometido ante el Congreso Nacional un proyecto de ley que busca unificar la Comisión Militar y Policial (Comipol) del Ministerio de Obras Públicas y el programa “Acarrea” del Ministerio de Interior y Policía, con el propósito de reducir la duplicidad institucional en las vías públicas y fortalecer la eficiencia del sistema de seguridad vial.

Crespo explicó que actualmente existen múltiples entidades operando en las carreteras con presupuestos distintos y funciones que en muchas ocasiones se superponen, mientras que la única institución respaldada por ley para operar en las vías es la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett).

El legislador comparó los recursos entre entidades y señaló que la Comipol maneja “millones de pesos, camionetas, radios de comunicación y una gran gama de herramientas”, mientras que la Digesett apenas cuenta con aproximadamente 73 millones de pesos al año, lo que —a su juicio— evidencia un desequilibrio en la asignación presupuestaria.

“Yo entiendo que tener tantas autoridades en las vías, dando servicios que pueden ser ofrecidos por una sola, no es eficiente. La asistencia vial debe ser parte de la seguridad vial que ofrece la Digesett. Por eso nuestro proyecto unifica la Comipol con el programa Acarrea”, afirmó.

Crespo insistió en que el país debe contar con un solo ente nacional que monitoree, vigile y registre las infracciones, y evite triplicidad de funciones.