Alicia García de Francisco
Madrid. El director de cine español Pedro Almodóvar, que competirá por el León de Oro de Venecia con su primer largometraje en inglés, ‘The Room Next Door’ (‘La habitación de al lado’), una cinta que terminó en tiempo récord, está hiperactivo” y ya tiene listo el guion de su próximo film, según su hermano y productor, Agustín Almodóvar.
En una entrevista con EFE, Agustín Almodóvar se mostró encantado con el gran momento creativo del realizador, que tiene muchos proyectos en mente, entre ellos una película que quiere rodar el próximo verano y de la que no quiere dar detalles.
Ahora prefiere centrarse en Venecia, que es el pistoletazo de salida para la temporada de premios y para facilitar la presencia de ‘The Room Next Door’ en las perlas -películas destacadas de otros certámenes- de San Sebastián, en el Festival de Toronto o en el de Nueva York.
“Estamos muy contentos, aunque nos estamos dando un atracón de trabajo”, señala Agustín Almodóvar, que reconoce que rodaron la película pensando en tenerla lista para Venecia, así que tuvieron que redoblar el esfuerzo para llegar a tiempo.
El director y guionista comenzó a montar el filme, protagonizado por Tilda Swinton y Julianne Moore, a la vez que rodaba.
Un gran esfuerzo que se “premió con la inclusión en una sección de un festival que es la puerta de la temporada de premios, justo antes del estreno de la película en España (en octubre) y en otros territorios, es estar en la pomada del cine mundial”.
Y a la satisfacción por estar en Venecia se une la que sienten por este primer largometraje en inglés, que llega tras los dos cortos que Almodóvar rodó en esta lengua: ‘The Human Voice’ (‘La voz humana’, 2020) y ‘Extraña forma de vida’ (2023).
La película es la culminación de un reto para el realizador manchego, “un perfeccionista” que siempre se sintió en inferioridad de condiciones para abordar un proyecto en inglés porque es muy meticuloso en la forma de hablar de los personajes, pero que lo ha superado con nota, según su hermano.
“Ha quedado muy satisfecho y a partir de ahora elegirá rodar en español o en inglés, pero no dependerá de tener que superar un reto”, resaltó el productor.
Una película rodada en parte en Nueva York, una experiencia muy agradable pese a que el equipo llegaba con cierto temor a los sindicatos y a las diferencias en el sistema de trabajo, pero les trataron “de maravilla”. “Fueron muy hospitalarios, con muchos técnicos muy jóvenes que habían dejado otros proyectos para poder trabajar con Pedro, al que admiran”, señala Agustín Almodóvar.
Además, tuvieron el cien por cien del control de la película, algo esencial para los Almodóvar, y encima el trabajar con Swinton y Moore fue “maravilloso”,
“Tilda ya es una chica Almodóvar y Julianne se incorporó muy bien a la familia artística”, algo que no siempre es fácil, sobre todo porque los intérpretes en Estados Unidos son muy poderosos y muy autónomos, mientras que en sus películas “Pedro se involucra muchísimo en la dirección de actores, así que a veces les cuesta entrar en esa dinámica, pero luego se dejan ir y va todo muy bien”.
Un proyecto que demuestra que el cineasta probablemente no cerrará aquí su carrera en inglés, aunque “queremos seguir trabajando en español porque está pasando por un momento dulce, con nuevo talento, nuevos actores y actrices jóvenes que le gustan mucho a Pedro”.
Y justamente, el estrenar en Venecia hace que la campaña de promoción esté más pegada al rodaje y postproducción, lo que hace ganar tiempo a Almodóvar para todos esos proyectos que ya le rondan. EFE