Mike Lupica/MLB.com
Hay muchas razones por las que los Mets han luchado con los altibajos de la manera en que lo han hecho hasta este punto de la temporada, especialmente durante el último mes. El dominicano Juan Soto no está ni cerca de ser una de ellas. O una especie de gran fracaso. Nada de eso, por más que sea un blanco fácil por el dinero que está ganando, porque el equipo ha tenido problemas y porque, bueno, es Nueva York.

¿Están sus números ofensivos ligeramente por debajo de lo que tuvo con los Yankees hace un año? Sí, lo están, a la vista de todos, bajo las brillantes luces de la gran ciudad. Soto se metió en un hoyo temprano, registrando un OPS de .701 hasta abril (mediocre para sus estándares), y ha estado tratando de salir de él a fuerza de batazos desde entonces.

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Hay muchas razones por las que los Mets han luchado con los altibajos de la manera en que lo han hecho hasta este punto de la temporada, especialmente durante el último mes. El dominicano Juan Soto no está ni cerca de ser una de ellas. O una especie de gran fracaso. Nada de eso, por más que sea un blanco fácil por el dinero que está ganando, porque el equipo ha tenido problemas y porque, bueno, es Nueva York.

¿Están sus números ofensivos ligeramente por debajo de lo que tuvo con los Yankees hace un año? Sí, lo están, a la vista de todos, bajo las brillantes luces de la gran ciudad. Soto se metió en un hoyo temprano, registrando un OPS de .701 hasta abril (mediocre para sus estándares), y ha estado tratando de salir de él a fuerza de batazos desde entonces.

Aun así, Soto conectó su jonrón número 32 el viernes por la noche contra los Bravos: Sólo hay tres jugadores en la Liga Nacional con más cuadrangulares y dos de ellos se apellidan Schwarber y Ohtani, quienes van a terminar 1-2 en la votación para el JMV de la liga.

Soto todavía tiene la oportunidad de llegar a 40 bambinazos como lo hizo con los Yankees. Incluso podría buscar la marca de 100 empujadas, a pesar de su promedio de bateo de .251; 30 puntos por debajo de la media de su carrera. Dicho todo esto, si esto es lo que se considera un año flojo para Soto con los Mets, ¿saben qué? simplemente te recuerda lo talentoso que es como bateador, antes de cumplir 27 años.

En una campaña en la que el foco de atención sobre Soto ha sido tan grande como nunca en su vida debido a ese contrato de US$765 millones que firmó el invierno pasado, no es como si se hubiera derrumbado de la manera en que su equipo lo ha hecho tan a menudo últimamente. Y todavía queda suficiente temporada para que muestre el mismo tipo de remate final que tuvieron los Mets hace un año.

Comenzó lento, sin duda. Su OPS todavía está por debajo de .900. Su porcentaje de slugging está en .500 después de dejar .569 con los Yankees. Su porcentaje de embasarse está en .386 después de ser .419 con los Yankees.

Quizás lo más notable es que, desde el 1ro de junio, batea .269/.411/.574, lo que está muy en línea con sus números de hace un año. Y también añadió un elemento de corrido de bases a su juego, robándose 20 bases –una marca personal– en 21 intentos. Uno todavía se pregunta cómo vería todo el mundo lo que ha hecho hasta ahora si los Mets hubieran lanzado mucho mejor de lo que lo han hecho.

Anoche en Atlanta, en un juego que los Mets terminaron ganando 12-7 tras otra sólida apertura del novato Nolan McLean, Soto conectó tres hits, anotó dos y empujó cuatro para que los Mets se pusieran un juego y medio por encima de los Rojos (quienes perdieron) en el último puesto del Comodín de la Liga Nacional. Soto también negoció dos boletos más, llegando a 100 bases por bolas por sexta vez en su carrera. Nuestra Sarah Langs (extraordinaria investigadora) señala que nadie en la Liga Nacional o Americana ha logrado eso tantas veces antes de cumplir 27 años.

Y la verdad es que todavía queda suficiente temporada regular para cambiar una narrativa que tiene a muchos seguidores de los Mets quejándose de su rendimiento, y francamente, haciéndolo sonar mucho peor de lo que ha sido. Mucho de esto se debe a que esta temporada de los Mets ha sido lo opuesto a la de hace un año, cuando comenzaron 22-33 antes de terminar como lo hicieron. Esta vez, han tenido un abismal récord de 27-36 desde que comenzaron 41-24.