Edgar Moreno
En las elecciones presidenciales del 19 de mayo próximo, en la boleta A aparecerán como candidatos presidenciales: Luis Abinader (PRM); Abel Martínez (PLD); Leonel Fernández (FP); Miguel Vargas Maldonado (PRD); María Teresa Cabrera (FA); Fulgencio Severino (PPT); Carlos Peña (GENS); Virginia Antares (OD); y Roque Espaillat (PED).
Sin embargo, consciente o inconscientemente, aunque los electores se decantarán votando por una (mandato legal) de esas nueve opciones (porque no existe la figura de Ninguno), al mismo tiempo lo estarán haciendo para confirmar el rechazo de cada una de las restantes candidaturas presentadas.
La realidad es que la posibilidad de que una cuarta vía (O un outsider) gane las elecciones presidenciales en mayo son remotas, por lo que los electores finalmente votarán para confirmar tres de las cuatro tasas de rechazo que se advierten en las cuatro opciones reales que tendrán los electores.
Es decir, entre los candidatos o entre las marcas, ganará finalmente el o la que menor tasa de rechazo registre de las cuatro opciones por las cuales podrán votar (El oficialismo, LFP, el PLD y el resto de las candidaturas).
Y es que al ejercer el derecho al sufragio (votar), los electores estarán aprobando una sola opción, y rechazando automáticamente las demás. El voto mayoritario habrá aprobado una opción, y habría desaprobado las tres restantes de las siguientes cuatro opciones presidenciales, y con ello habría ratificado la desaprobación real que pesa sobre las mismas. Nos referimos a:
La tasa de rechazo del Sr. Luis Abinader y su gobierno.
La tasa de rechazo del Sr. Leonel Fernández (No de La Fuerza del Pueblo).
La tasa de rechazo de la marca PLD (No del candidato Abel Martínez).
La tasa de rechazo de una cuarta vía (emergentes o outsiders).
En otras palabras, al parecer ganará una vez más la opción que menos rechazo finalmente obtenga, ya sea por intermedio del candidato, o vía la marca que lo postula.