El Sindicato de Teatristas de la República Dominicana (SITEARD) expresa su profunda preocupación por el deterioro de la institucionalidad y el creciente proceso de centralización que afecta al Ministerio de Cultura, lo que ha impactado negativamente la calidad de los eventos culturales, obstaculizando la participación activa y el acceso a oportunidades a trabajadores del sector.
Estas observaciones fueron recogidas en la evaluación del XI Festival Internacional de Teatro (FITERD 2023), tras una consulta a su membresía participante.
En documento remitido a las autoridades del Ministerio de Cultura, el Sindicato asegura que el deterioro institucional se evidencia en la desaparición de instancias y el desplazamiento de directores, técnicos y personal administrativo de las labores de coordinación que les competen; en la contratación de asesores externos y la concentración de ejecutorias gubernamentales en funcionarios de alto rango, que invisibilizan los esfuerzos de los trabajadores gubernamentales, prácticas que dificultan la fiscalización de las ejecutorias y la rendición de cuentas. Las y los teatristas solicitan información sobre el aparente desmantelamiento de la Oficina Nacional de Festivales, un hecho que aseguran atentó contra el derecho a la cultura de la ciudadanía que no tuvo conocimiento a tiempo, al no ser debidamente difundidas en medios de comunicación las actividades que se desarrollaron en el marco del FITE 2023, impidiendo el pleno disfrute y participación masiva del público.
A pesar de haber definido la ciudad de Santiago como sede del festival, el Sindicato plantea que los funcionarios locales y el potente movimiento cultural independiente de la ciudad no tuvieron una participación real y protagónica en la coordinación del evento.
Las y los trabajadores de la escena aseguran que Santiago está más que listo para liderar sus propios procesos, y que el Estado debe garantizar presupuesto y representación en espacios de toma decisiones tanto de funcionarios locales como de creadores independientes.
Recuerdan que hace un año, el presidente Luis Abinader visitó Santiago y realizó diversas promesas al sector cultural. Sin embargo, a pesar de la celebración del festival en dicha ciudad, las salas oficiales siguen en condiciones deplorables y Santiago carece de un presupuesto para implementar políticas culturales.
SITEARD exige mayor transparencia en la convocatoria, selección y programación de las obras participantes del FITE. La adjudicación de los servicios culturales debe ser de conocimiento público de forma oportuna, ya que hay una ciudadanía activa y articulada interesada en vigilar la inversión pública. Además, llama la atención sobre el uso indolente de los recursos del Estado, pues los montos destinados al alquiler de luces y otros servicios para el FITE, podrían haberse utilizado para equipar y dar mantenimiento a las salas de teatro de manera permanente.
El gremio reclama garantizar una representación plural y democrática de los dominicanos residentes en el exterior y jóvenes creadores; lamenta la ausencia de actividades en el Centro Cultural Monina Cámpora de San Juan de La Maguana.
Asimismo, rechaza la exclusión de facilitadores nacionales en la programación de talleres del FITE 2023, basada en prejuicios hacia el trabajo local, lo que vulnera a los profesionales dominicanos su derecho de acceder a oportunidades de contratación de servicios culturales que el Estado debe garantizar en igualdad de condiciones.
En medio de desafíos institucionales, SITEARD destaca el esfuerzo de los trabajadores, creativos, técnicos y administrativos dentro y fuera del Ministerio de Cultura. Hace un llamado a los funcionarios de alto rango a respetar y fomentar la institucionalidad y a romper con las prácticas centralizadoras y excluyentes que van en detrimento del avance de la cultura de forma plural y democrática.