María Hernández
El mundo se estremece y se solidariza con manifestaciones de todo tipo en contra de la violencia, que sufren las mujeres dentro de su entorno familiar o fuera de él. Las cifras de muertes violentas de mujeres son alarmantes a nivel local y global.
Lo más difícil es cuando esa violencia se ejerce desde el Estado, como en naciones de origen árabe o musulmán como son Irán, en donde la muerte de una joven que llevaba mal puesto su velo ha dado lugar a fuertes manifestaciones de protesta que han dejado casi 400 personas fallecidas, o en Afganistán en donde siguen apretando el látigo para las mujeres como si se tratara de niñas castigadas por sus padres por no obedecer ciegamente sus antiguas normas.
No solo se ejerce violencia cuando se agrede físicamente, si no cuando se le alza la voz a la persona y se le maltrata de forma sicológica o se le violan todas sus libertades consagradas en la Carta Magna de cada país.
En la República Dominicana no se detienen los feminicidios, por parte de parejas o ex parejas de las mujeres que quedan atrapadas bajo una cultura machista que todavía prevalece en nuestro país a pesar del desarrollo que se muestra en campañas de publicidad a través de los medios de comunicación, dentro de las que ninguna va dirigida a orientar a los varones sobre la forma en que deben conducirse con las mujeres y con los demás.
El Ministerio de la Mujer, en pasadas gestiones, se preocupaba por orientar a la ciudadanía, respecto a cómo evitar la violencia contra las féminas y para este tiempo siempre preparaban promociones sobre cómo comunicarse con la institución cuando la mujer pasaba por algún problema familiar o era amenazada por su cónyuge, incluso tenían un número telefónico en donde llamaban y se les prestaba atención, de inmediato.
Recordamos una campaña, cuando la profesora y dirigente política, Alejandrina Germán dirigía ese ministerio que se difundió por radio, televisión y otros medios de comunicación: “Únete para poner fin a la violencia contra las mujeres”.
Las mujeres, en nuestro país, están desprotegidas y son las primeras víctimas de los atracos que se producen diariamente en diferentes sectores de todas las clases sociales, porque anteriormente solo se hablaba de Capotillo, La Ciénaga, Los Guandules, Villa Francisca, Cristo Rey, entre otros, hoy la delincuencia se burla del Sistema en cualquier parte y sin importar horas específicas del día o la noche.
Hasta el mes de julio de este 2022 la República Dominicana reportó 43 feminicidios, de las cuales 24 fueron asesinadas en el primer semestre de este año y el mes de abril fue uno de los más sangrientos con 13 mujeres muertas por sus parejas o ex parejas, de acuerdo a datos de medios como Listín Diario y Prensa Latina.
Según informaciones de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), al menos 4,473 mujeres murieron por feminicidios en América Latina y El Caribe el pasado año 2021.
Esos mismos datos arrojan que Honduras, República Dominicana, El Salvador, Bolivia y Brasil son los países más inseguros para las mujeres de América Latina.
También, se ejerce violencia contra las mujeres cuando se les obliga a realizar trabajos sexuales en contra de su voluntad, como algunas dominicanas y extranjeras que se encuentran en esa situación en nuestro país y a las que se protege mediante la ley 137-03, en sus artículos del 8 al 11 en lo concerniente a “víctimas de trata”, como se destaca en el Estudio Cualitativo sobre trata de mujeres extranjeras en la República Dominicana que realizó, en el 2021, el Instituto Nacional de Migración de nuestro país.
Además, lucir prendas o una fina cartera han quedado en el pasado para las féminas que habitan en el país, en donde en los últimos años hasta los hombres ya no llevan dinero en la cartera, cuando se trasladan a pie por algún sector, sino en lugares menos llamativos para los malhechores.
Se ejerce también violencia contra la mujer cuando, se presentan los rostros de menores por los medios de comunicación y redes sociales a las que se les acusa de uno u otro hecho sin haber pasado por los tribunales y ya para la sociedad esa mujer es culpable de algo que no se le ha comprobado que lo haya cometido.
También, ejerce violencia contra la mujer, la pareja desconsiderada y, en muchos casos, abusiva que pretende que ella se lo haga todo, aunque llegue cansada de trabajar. Cuando las parejas se apoyan mutuamente en todo, el trabajo se equilibra y pesa menos y no hay que terminar en conflictos que se pueden evitar con el diálogo y la comprensión de ambos.
Se recuerda que el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer que se conmemora, cada 25 de noviembre en todo el mundo, es en recordación del vil asesinato de las Hermanas Mirabal, Patria, Minerva y María Teresa que fue una iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas y ONU Mujeres con el objetivo de concientizar a la población mundial sobre los derechos de las mujeres y se realiza desde el año 2008. La campaña internacional que este año lleva el nombre “16 Días de Activismo contra la Violencia de Género” concluirá el 10 de diciembre con una jornada que será dedicada a los Derechos Humanos.
Que cesen ya los feminicidios y muertes violentas de ciudadanos en la República Dominicana.
