Los Ángeles. En diciembre de 1997 llegó por primera vez a los cines en algunos países “Titanic”. La película contaba una historia de amor romántico y dramático entre una joven de clase alta, Rose DeWitt, obligada a casarse, y Jack Dawson, un joven pasajero de tercera clase a bordo del barco. Este navío, el Titanic, protagonizó uno de los naufragios más famosos de la historia, del que se cumplieron 110 años el pasado abril.
Los elegidos para interpretar a los protagonistas fueron Kate Winslet y Leonardo DiCaprio. Estos personajes supusieron un antes y después en sus carreras, pero no fueron los únicos candidatos. “Hice la audición con Matthew [MacConaughey]. ¡Nunca había dicho eso en público antes!”, dijo Winslet en 2017 en el programa The Late Show with Stephen Colbert. Jeremy Sisto también hizo una prueba.
Winslet sabía que el papel de Rose tenía que ser para ella: “Cerré el guion, lloré como una magdalena y dije: Vale, absolutamente, tengo que ser parte de esto”, dijo en una entrevista con Rolling Stone en 1998. La actriz, que por aquel entonces tenía 19 años, contactó con Cameron directamente y le contó cuánto quería interpretarla. Incluso llegó a enviarle una rosa. “Jim se arriesgó al elegirme”, dijo en 2012 a USA Today. “Muchas de mis contemporáneas eran candidatas mucho más probables. Tuve suerte”.
No era la primera cinta en la que la actriz, que nació en 1975 en Inglaterra, participaba. Antes había formado parte del reparto de “Heavenly Creatures”, de 1994; “Sense and Sensibility”, de 1995, y “Jude”, de 1996, entre otros trabajos. Pero el éxito mundial de la película la puso inmediatamente bajo los focos. “Para ser sincera, me sentí intimidada”, dijo en el podcast WTF el año pasado. “Fui objeto de escrutinio físico y personal y fui muy criticada. La prensa británica en realidad fue bastante desagradable conmigo”.
DiCaprio, sin embargo, parecía no tener tan claro que quería ser parte del proyecto. Según contó la actriz a Rolling Stone, aprovechó que ambos estaban en el Festival de Cannes para convencerle. “Titanic fue en gran medida un experimento para Kate Winslet y para mí”, dijo el actor a Deadline en 2016. “Habíamos hecho todas esas películas independientes. La amaba como actriz y ella dijo: Hagamos esto juntos. Podemos hacerlo. Lo hicimos y se convirtió en algo que nunca podríamos haber previsto”.
DiCaprio, que en el momento del estreno tenía 23 años, había participado en otras producciones como “Critters 3”, en 1991; “This Boy’s Life”, en 1993; “The Basketball Diaries”, de 1995, y “Romeo + Juliet”, en 1996, entre otras. Tras el éxito de la cinta, añadió a su filmografía otros títulos como “The Man in the Iron Mask”, “The Beach” o Gangs of New York”, entre otros. Winslet, por su parte, sumó proyectos como “Eternal Sunshine of the Spotless Mind”, “The Reader” y “Revolutionary Road”, entre los más destacados.
Un año después, en 1998, “Titanic” llegó a los Óscars con 14 nominaciones, igualando a “All About Eve”, la que más tenía hasta entonces. Aquella noche, la producción se llevó 11 estatuillas, entre ellas la de mejor dirección y mejor película. Winslet fue nominada a un premio de la Academia por segunda vez en su carrera, reconocimiento que finalmente consiguió tras varias nominaciones y nueve años después, por “The Reader”. DiCaprio no fue nominado en aquella ocasión y tuvo que esperar a 2016 para hacerse con el galardón por “The Revenant”.
El presupuesto total de la película estuvo alrededor de 200 millones de dólares, uno de los más altos por aquella época. El rodaje requirió de un gran número de extras, atrezo, tanques de agua, efectos especiales, etc. Los beneficios, sin embargo, superaron con creces el desembolso. “Titanic” se convirtió en la cinta más taquillera de la historia con más de 2.000 millones de dólares recaudados y permaneció como tal hasta 2009, cuando fue superada por “Avatar”, del mismo Cameron. Actualmente ocupa la tercera posición tras “Avengers: Endgame”.